Mamándosela a un macho alemán

Buenas. Os cuento a continuación otra mamada a un hetero.


Esto fue en Barcelona. El chico era alemán y estaba de paso.

Media unos 1'80 y era atlético, moreno, con rasgos muy marcados.


Me dijo como le gustara que lo hiciera por teléfono. Él era hetero y no iba

a hacer nada, solo dar el rabo.


Llegue a su hotel y me recibió con las persianas medio bajadas. Tal como habíamos acordado, me fui quitando la ropa para desnudarme completamente. Mientras lo hacía, le

mostraba el culo, porque dijo que eso le daba morbo.


El tío no se movió de al lado de la cama. Estaba vestido con tejanos y una camisa. Esperaba de pie paciente.


Yo estaba muy excitado. Fui para él completamente desnudo. Entonces me empezó a tocar y yo me dejé hacer. Rápidamente me agarro la cabeza y me hizo presión para que bajara. Se desabrochó los tejanos y saco su polla, bastante grande y grosor normal. Estaba ya bien morcillona. Me la paso un poco por los morros y a nariz para que la oliera.

Sin tardar demasiado, me metió un dedo en la boca para que la abriera, y así aprovecho para meterme la polla.


Empezó a follarme lentamente la boca, mientras gemía de gusto. Yo estaba de rodillas con una mano apoyada en la cama y la otra estirada. El tío se animó y me cogió la cabeza para follarme la boca mejor. El tío iba buscando todos los ángulos de la boca para que la polla llegara a todos los rincones.


A veces, me metía la polla hasta la garganta y me ahogaba un poco, con alguna que otra arcada. Lo repetía de tanto en tanto, y luego volvía a la follada suave. A veces, yo le cogía las piernas y se la chupaba a saco. También me la metía hasta la garganta.


El tío me miraba desde arriba sin quitar ojo. Le gustaba en la posición que estaba. Era una posicón dominante: el miraba desde arriba, y yo arrodillado chupándole el rabo. En un par de ocasiones, me dijo en inglés "ahora mírame, y metete toda la polla". Y yo sin dejar de mirarlo, le obedecía.


Cuando estuvimos ya un buen rato, el tío dijo que se iba a correr. Me la sacó de la boca y empezo a pajearse. De seguida empezó a soltar trallazos en toda mi cara y parte de la espalda. Yo también me corrí a saco, puffff. Quedé bien empapado de lefa.


Como me gusta hacer estas cosas en mis escapadas a Barcelona ))